parte anterior: El equilibrio de los mundos capitilo 13
Capítulo 14: Un Corazón en Conflicto
Eira esperaba frente a la puerta de Zephyr, su corazón latiendo con fuerza mientras intentaba reunir el valor para explicar lo que le había sucedido. Cuando la puerta finalmente se abrió, y Zephyr apareció, Eira sintió una oleada de alivio y emoción. Sin pensarlo dos veces, se lanzó hacia él y lo abrazó con fuerza.
—Eira, ¿qué ocurre? —preguntó Zephyr, notando la ansiedad en sus ojos.
Eira respiró hondo, tratando de encontrar las palabras correctas. Su voz temblaba ligeramente mientras hablaba.
—Zephyr, durante mi entrenamiento, me desmayé y… y 3ì4â tomó el control de mi cuerpo. Por suerte, no hizo nada malo, pero estoy asustada. No sé qué hacer.
Zephyr sintió una punzada de preocupación, pero mantuvo la calma para no asustar más a Eira. La sostuvo con firmeza, acariciando suavemente su espalda para tranquilizarla.
—Eira, lo superaremos juntos —dijo en un tono reconfortante—. No estás sola en esto. Vamos a encontrar una solución, te lo prometo.
Eira levantó la vista, sus ojos encontrando los de Zephyr. Había algo en su mirada que le daba fuerza y confianza. Lentamente, se fueron acercando, sintiendo la atracción entre ellos intensificarse. Justo cuando sus labios estaban a punto de encontrarse, una voz los interrumpió.
—¡Eira! ¡Zephyr! —exclamó Aurora, apareciendo de repente en el pasillo—. Lo siento por interrumpir, pero Nix está enferma y está alucinando. Necesitamos ir a verla, ahora.
Eira y Zephyr se separaron bruscamente, el momento roto por la urgencia en la voz de Aurora. Sin dudarlo, ambos asintieron y siguieron a Aurora por los pasillos de la academia hasta la habitación de Nix.
Al llegar, encontraron a Nix en su cama, sudando y murmurando palabras incoherentes. Sus ojos estaban abiertos, pero parecían no enfocar nada en particular. Aurora se arrodilló a su lado, tratando de calmarla.
—Nix, estamos aquí —dijo Aurora suavemente—. Vamos a cuidarte.
Eira y Zephyr se acercaron, intercambiando miradas preocupadas. La enfermedad de Nix parecía grave, y las alucinaciones indicaban que algo muy extraño estaba sucediendo.
—¿Qué crees que le está pasando? —preguntó Zephyr, susurrando para no alterar a Nix.
—No lo sé, pero debemos encontrar ayuda inmediatamente —respondió Aurora con determinación—. Tal vez alguien en la academia pueda decirnos qué hacer.
Eira asintió, su preocupación por Nix superando por un momento sus propios temores. Juntos, los tres amigos se dispusieron a buscar ayuda, con la esperanza de que pudieran salvar a Nix de lo que fuera que la estaba afectando.
El capítulo terminó con ellos apresurándose por los pasillos de la academia, uniendo sus fuerzas para enfrentar este nuevo desafío.